El reino de Sausán ha caído en desgracia desde la marcha de la reina. King Lucas se ha quedado solo en su castillo, acompañado de su corte y sus hijas, hasta que una maldición asola el castillo, moviendo continuamente las habitaciones del lugar. El rey, asustado, consigue escapar, pero sus hijas están perdidas en las habitaciones, y está dispuesto a todo para recuperarlas, escribiendo a los más audaces caballeros del reino para prometerles grandes tesoros y su eterna gratitud. Algunos contestan a la llamada, pero una vez entran en el castillo, no vuelven a salir.
Hasta que tú llegas por casualidad al castillo; solo estás de paso, pero el rey desesperado te implora que rescates a sus hijas. Te advierte de la maldición y te pide que vayas con cuidado. Dentro del castillo habitan seres muy hostiles, y además está lleno de trampas. ¿Serás capaz de encontrar a la familia real? ¿Averiguarás el misterio que se esconde detrás de los acontecimientos?.
El castillo Sausán
La maldición moverá las habitaciones una vez que empecemos la misión. Estas se mantendrán en su orden hasta que tengamos que volver a entrar a buscar a una princesa. Además, el área a explorar irá creciendo. Empezaremos con unas poquitas habitaciones, hasta tener que recorrer las 1223 habitaciones que forman el castillo. La ubicación de las princesas no la sabremos, por lo que deberemos explorar las habitaciones hasta dar con ellas.
Habitaciones
El desplazamiento es con scroll lateral y las habitaciones tendrán salidas por los cuatro extremos, formadas por diferentes elementos, como escaleras, plataformas y puertas. Encontraremos muchos accesos cerrados por las puertas, que se abrirán con las llaves que encontremos. No hay que malgastar estas llaves, ya que a veces, realizando un rodeo, se puede acceder a zonas bloqueadas. Hay paredes que se podrán atravesar, habiendo un jugoso premio al final del pasillo secreto. Nuestro héroe podrá correr, golpear y saltar, con momentos de plataformas algo exigentes.
Hay tres tipos de habitaciones especiales; unas están ubicadas en las catacumbas. Son trampas mortales, pero podremos recoger objetos necesarios. Si morimos, los objetos que hayamos conseguido se mantendrán en la siguiente partida. Los balcones esconderán algunas monedas, además de poder saltar; pero cuidado, si el salto es muy alto perderemos la vida. En la azotea del castillo se esconden secretos, aunque alcanzarla será en las últimas misiones.
Bidones y trampas
Es una aventura de una dificultad elevada, que nos recuerda a los juegos de los 80, así que en esta locura de pasillos no podían faltar las trampas. Pinchos y lava (a veces escupen bolas de fuego) son los principales obstáculos que deberemos evitar. También hay caídas al vacío y plataformas móviles, que nos harán calcular el salto perfecto en el momento adecuado. El agua es otro elemento que nos permitirá bucear sin límite de tiempo.
Por el escenario encontraremos bidones de madera, que al romperlos nos brindará con unas valiosas monedas de oro, pócimas, checkpoints, llaves o una bruja. Las monedas de oro las usaremos para comprar objetos; las pócimas pueden regenerar nuestra vida o ser invencibles durante un tiempo; los checkpoints nos permiten revivir en esa habitación, en vez de volver al principio.
El Herrero y la Bruja
Empezaremos por la Bruja, ya que la hemos nombrado anteriormente. Nos venderá objetos como las pociones que podremos encontrar o llaves. Hay dos objetos muy valiosos: la brújula y la bola de cristal. Si optamos por la brújula, nos indicará durante un tiempo la dirección donde se halla nuestro objetivo. La bola de cristal también tendrá un efecto temporal, marcándonos el número de habitaciones de distancia donde se encuentra el objetivo.
Por otro lado, está el Herrero que nos venderá armas y escudos. Entre las armas tendremos una buena variedad: espadas, dagas, hachas de guerra y báculos mágicos, entre otros. Estas armas se diferencian por el daño que causan, la distancia del golpe y la velocidad de ejecución. Las armas que compremos se desgastarán con el uso, excepto la daga del inicio. Los escudos aumentarán nuestra vida hasta romperse.
Algunas armas tienen poderes elementales, como el hielo o el fuego. Si usamos el hielo, paralizaremos unos segundos a nuestro enemigo. Si golpeamos con fuego, el enemigo seguirá perdiendo vida por quemaduras. Usando el inventario podremos equipar las armas o guardarlas.
Las monedas de oro se usarán para comprar objetos. Estas las encontraremos en bidones, por el escenario o derrotando enemigos. Las mayores recompensas se ganarán al completar misiones o venciendo a los jefes que se esconden por el mapa.
Inquilinos
En el castillo encontraremos diferentes personajes con los que entablar conversación, que realizarán comentarios divertidos o frikis y, sobre todo, le darán un giro a la historia. Algunos incluso nos enviarán a realizar misiones secundarias. Completarlas nos aportará una buena recompensa. Lo único que tendremos que hacer es matar a un número de monstruos. Entre los personajes encontraremos a León, Leopoldo, Rosa, Anna y Adelaida, en una trama digna de un cuento de hadas.
Monstruos
Muchos enemigos nos esperan entre las paredes del castillo, aunque no gozan de una gran inteligencia artificial. Entre ellos encontraremos a magos, arañas, babosas, ratas, caracoles, fantasmas, pirañas, serpientes, esqueletos, cíclopes, murciélagos y brujos. Todos ellos con un diseño muy simpático y gracioso, aunque hay habitaciones especiales que nos aguardan con un jefe final. Hasta que no los derrotemos no podremos salir. Algunos se repetirán y podremos encontrarnos con dragones, anguilas, ojos y abejas de un gran tamaño, que al derrotarlos nos aportará un cofre de dinero.
Una vez hayamos derrotado a un enemigo, durante esa misión, seguirá muerto. Incluso si los herimos también mantendrán los daños causados. Los objetos tampoco volverán a aparecer, por lo que hay que poner preferencias.
Apartado técnico
Gráficamente el juego no destaca, con fondos sosos. Las habitaciones solo están adornadas con enemigos, trampas y obstáculos. Cuando se juntan muchos enemigos en pantalla, hemos sufrido alguna ralentización. Para no perdernos por el castillo, tendremos un mapa de referencia basado en cuadrículas, que nos marca nuestra posición, la del herrero y la bruja, además de las habitaciones visitadas. Los textos están completamente en castellano, algo de agradecer. Las melodías se quedan en los efectos de sonido, y en el agua sonarán ahogados.
No hay muchos temas musicales, salvo los toques de trompetas anunciarán nuestra entrada triunfal en el castillo. Un piano dará tristeza a nuestras muertes. Durante el juego contaremos con una banda sonora escasa, pero de una calidad excelente. Acorde de piano, violín y trompetas en varios temas que acompañan perfectamente.
En fin, un gran juego que promete horas y horas de entretenimiento buscando a las princesas, con ese toque ochentero tan de moda últimamente.
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